¿Cómo nos sentimos en cuarentena?

Hace un año sucedió todo. Nos encerramos en nuestras casas por un virus. Nadie pensó que fuera fácil pero no nos preguntaron cómo nos sentiríamos en una cuarentena.

Aquí os dejo una reflexión que escribí hace un año en mi habitación rodeada de 4 paredes que parecían que serían para siempre.

Necesitamos gestionar nuestras emociones para saber cómo nos sentimos en una cuarentena, actualmente por el Covid-19. Si sabemos y aceptamos cómo nos sentimos estamos a un paso de estar bien.

¿Cómo nos sentimos en cuarentena?

Encerrados por 4 paredes sin 0 ganas de hacer nada. Encerrados para salvar un mundo destruido por nuestro egoísmo. Un mundo que ha decidido arrancarse la tirita de golpe para hacer reaccionar a los demás.

Tenemos que unirnos. No necesitamos en este momento el egoísmo característico del ser humano. Es irónico que humanidad signifique solidaridad y comprensión, cosa que muy pocos tienen. Es verdad, ahora hay que buscarse a uno mismo para poder entender a los demás. Comprender que lo que te pasa a ti le pasa el resto y atender esas necesidades comunes.

¿Qué ha conseguido la pandemia?

Esta pandemia ha conseguido que frenemos un poco y pensemos. Cada hora que pasa de cada día solo puedes ver las paredes que te rodean y, ¿qué te queda? Tu propia mente. Te queda pensar en ti y en los demás, en lo que juntos se puede hacer para salir de estas 4 paredes y recuperar esas ganas perdidas.

Es hora de perderse en nuestro interior para poder evolucionar. Esto hará que te construyas pieza por pieza, que cuando salgas seas más fuerte fuera y compartirlo.

Hay momentos en los que la angustia y la ansiedad se apoderan de tu cuerpo y mente, es normal. Lo que sucede no es nuevo para el mundo, pero sí para nosotros. Siempre en todo camino hay obstáculos y no he visto a nadie quedarse de por vida en el camino. Todo el mundo llega al final y lo hace con más fuerza.

Reflexiona

¿Alguna vez pensaste en darte por vencido? Si la respuesta es sí, estoy segura de que al final diste la vuelta a todo e hiciste tu mismo un camino secundario para llegar a tu meta.

Piensa como fue ese proceso porque solo diré que esto supondrá el principio del fin. Tenemos que rebobinar y crear atajos para llegar al final. Cuidémonos y cuidemos lo que nos rodea.

Debemos aprovechar esto y darnos cuenta del escaso tiempo que tenemos y qué queremos hacer con ese tiempo, seguro que tenemos ganas de vernos pero hay que hacerlo de forma responsable para que podamos vernos en un futuro mucho más.